¿Quieres volver atrás al Madrid de hace 100 años?
Entrar en la estación de Chamberí es volver al pasado concretamente a 100 años atrás. La antigua estación de Chamberí pertenece a la primera Línea de Metro que inauguró el rey Alfonso XIII en Madrid en 1919.
La estación de Chamberí formaba parte del primer proyecto de Metro de Madrid: la línea que unía Sol con Cuatro Caminos. Desde 1919 prestó su servicio entre las paradas de Iglesia y Bilbao.
A principios de los 60, la Compañía Metropolitana decidió aumentar la longitud de los trenes y ante la imposibilidad de alargar esta estación, la clausuró. El cierre definitivo tuvo lugar el 22 de mayo de 1966.
En 1966 se decidió cerrarla y se abandonó. Se tapiaron los accesos al exterior, se apagaron las luces y los trenes dejaron de parar. Nacía la estación fantasma de Chamberí.
Luego os contaré por qué se le llama fantasma…
UN POCO DE HISTORIA DE LA ESTACIÓN DE METRO DE CHAMBERÍ
¿Por qué se le llama fantasma? Porque se convirtió en refugio para personas sin hogar y, al paso de los trenes, los viajeros veían siluetas en movimiento.
CÓMO LLEGAR, HORARIOS Y ENTRADAS
La estación de Chamberí –o Andén 0, está, en la plaza de Chamberí sin número, en la esquina de las calles Luchana y Santa Engracia. Vamos a ver como una entrada de metro.
Solo se puede entrar al Andén 0 con reserva previa –puedes hacerla en la web de museos de Metro Madrid– my con visita guiada. La visita es gratuita y tiene una duración de unos 25-30 http://www.museosmetrodemadrid.es
Hay visitas solo los fines de semana: del viernes por la tarde al domingo por la mañana. De 10h a 14h por las mañanas –sábados y domingos– y de 16h a 20h por las tardes –viernes y sábados–.
¿SABÍAS QUE…?
En 2006 se lanzó un proyecto de rehabilitación con la idea de volverla a abrir al público como museo de Metro de Madrid. Cosa que se hizo en 2008.
LA EXPERIENCIA DE LA VISITA AL MUSEO DEL “ANDÉN 0” DE MADRID
Cuando entras ves La decoración de azulejos blancos clásicos del metro que son obra de Antonio Palacios que diseñó aquellas primeras paradas en 1919.
Estos carteles publicitarios son uno de los grandes atractivos de la estación, ya que se conservan intactos como hace 100 años.
Se Incorporó la luz natural mediante un lucernario en el vestíbulo porque claro meterse bajo tierra era algo novedoso para la población y tenían una cierta inquietud y esa luz exterior les daba seguridad. Además, las bombillas eran de medio vatio, era muy poca luz. Para el interior Palacios eligió un recubrimiento cerámico con ornamentos. Después tenemos los recuadros de azulejos sevillanos que limitan el contorno de los anuncios, en ocre y azul. Estos carteles publicitarios son uno de los grandes atractivos de la estación, ya que se conservan intactos como hace 100 años.
El vestíbulo sigue siendo tan estrecho como hace cien años, con su bóveda de medio cascarón. Hay un cuadro de avisos con las tarifas que valía 15, 25 o 35 céntimos el billete… También la taquilla es el pequeño cuartito original. Está el vestuario donde se cambiaban los trabajadores.
Los accesos se abrían al pisar en la plataforma que había frente a ellos. Y tienes un hueco con un cartel para tirar los billetes usados.
Solo uno de los dos andenes de la estación se puede visitar porque el otro andén quedó muy estrecho y por motivos de seguridad, está cerrado al público.
LOS ANUNCIOS DE LA ESTACIÓN FANTASMA DE CHAMBERÍ
La joya de la estación son sus anuncios que están hechos con azulejos. Azulejos pintados en los que aparecían las marcas y sus mensajes publicitarios. Perfumería Gal –en los cuatro lugares preeminentes de la estación: las esquinas–, Phillips y sus bombillas –las nuevas de medio vatio–, Cementos Portland, Cafés La Estrella…
En la visita a cada rato se junta pasado y presente porque pasan los vagones actuales a toda velocidad y el guía tiene que quedarse callado unos segundos.
Y además al iniciar la visita te regalan un pasaporte que te sellan y que debes ir sellando cuando vayas visitando los demás espacios museísticos del metro como… La Nave de Motores de Pacífico, donde están ubicados tres enormes motores diésel que en su momento sirvieron para generar y transformar la energía con la que funcionaban los trenes. Y además podrás visitar:
- Estación de Chamartín.
- Exposición trenes históricos de Metro
- La fuente de Los Caños del Peral
- Estación de Ópera (líneas 2, 5 y Ramal). Pza Isabel II, 1
- O el Vestíbulo de Pacífico
El antiguo vestíbulo de Pacífico ha sido rehabilitado y conserva el mismo aspecto en el que se encontraba en el año 1923
Es un plan muy nostálgico para hacer en el fin de semana, podéis reservar entrada gratuita en la web http://www.museosmetrodemadrid.es